lunes, abril 02, 2012

De nuevo en la calle.

Vuelvo a la calle donde viví, donde siempre estará una parte de mí. La parte que me cortó y enterró la primera chica de la que me enamore.

La nueva escoria.

Nuestra generación adora la imperturbabilidad, la frialdad. El pasotismo es el dios, la meta, el sueño, la vacuidad total en mente y espíritu es el no va más hoy en día.

El nihilismo es chic, el abandono es fenomenal, la autodestrucción es el colmo del encanto.